La palabra incluyente e inclusivo son sinónimos. La más ocupada es inclusivos, pero también podemos ir involucrando dentro de nuestro vocabulario, la palabra incluyente. Ahora, los servicios son aquellos trabajos que se brindan a una sociedad o un sector de la población; estos pueden ser ya sea servicios públicos o servicios al cliente.

Un servicio de cualquier tipo tiene que ser inclusivo. Si estamos dando un servicio, por ejemplo, de atención al cliente turístico en un hotel, ese servicio tiene que ser inclusivo. También los servicios públicos que se dan dentro de la municipalidad de un barrio deben ser inclusivos. Un servicio incluyente es el que cualquier persona, ya sea con o sin discapacidad necesita; esto con los distintos ajustes necesarios para que a cada una se le atienda de manera inclusiva.

Dentro de las instituciones u organismos que se dedican a hacer proyectos de mejora a los servicios y calidad de vida de la población, así como dentro de las empresas que ofrecen variedad de servicios, se necesita de un equipo o persona que sea especializado en temas de inclusión. Por ejemplo, al estar brindando un servicio de atención al cliente y llega una persona ciega, y no se sabe siquiera cómo el equipo va a reaccionar o va a atender, nos muestra lo necesario que es tener a un especialista de inclusión, y no solo de género o de equidad de género en cualquier entidad. En general, es necesario que toda la población del mundo cuente con especialistas que sepan tanto sobre inclusión, como accesibilidad y cómo tratar a una persona con discapacidad.

Existen muchísimos proyectos de cooperación internacional que están apoyando, dentro de nuestra población, con distintas áreas como:  seguridad ciudadana, urbanismo, medio ambiente, incluso, migración. El componente inclusión no solamente es género, sino también es discapacidad y debe ser un eje transversal en todo. Los responsables son las empresas privadas y el sector público, también los organismos internacionales que vienen a cooperar en nuestro país y a brindar estos servicios y proyectos, no solo por cumplir algún tipo de estándar, índice o estadísticas, sino que también para poder dar una mejor calidad de vida a los usuarios o a las personas que poseen algún tipo de discapacidad. Esto se logra únicamente con el poder de la información por medio de la capacitación.

La empresa privada y el sector público deben trabajar en conjunto, sin conflicto. En el sector público, con la cooperación internacional, ninguno tiene que formar un equipo, más bien, tienen que trabajar en conjunto, pues la meta es la misma: tener una mejor calidad de vida, una mayor inclusión social, mayor equidad y una mejor situación social dentro de El Salvador.

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